Grito 6 Comatose Noche 2 «Sótano»

¡Hallooooooooooo! ¡Hola! ¿Como están, chicas? Yo anciosa por que lean este cap que fue muy divertido de crear ¡creanme! Gocé muchísimo escribiendo esta noche... agradezco a las chicas que comentaron, me levantan mucho el ánimo n.n espero que les guste y disfruten de esta historia... cuidense mucho, besos, bye...

Grito 6 Comatose Noche 2 «Sótano»

En ese instante, perdí la noción y me desmayé, sintiendo un libro pesado caer (para rematar) en mi rostro…

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Poco a poco iba abriendo los ojos… vaya que si dolía mi cuerpo, estaba adolorido de los brazos, las muñecas, los codos, la cabeza, las piernas ¡De todo! Y me encontraba recostado en una especie de diván, en un lugar oscuro, cerrado e iluminado tan solo por velas… ¿Qué me ha ocurrido?

-¿En dónde estoy? –Pregunté intentando levantarme con esfuerzo, pues sentía la columna quebrada en pedacitos-

Miré a mi alrededor y me encontraba rodeado de varias chicas y uno que otro muchacho…

Todos eran raros, rubios, muy blancos ¡Casi como la nieve! No, aún más blancos… ellas eran bellísimas, ellos muy atractivos… todos eran casi etéreos, y eso me llamó mucho la atención…

-No te levantes –Me dijo uno de ellas, volviéndome a recostar suavemente, empujándome a la cama- aún estás débil por la caída y los golpes que te diste –Rió amablemente y se sentó a mi lado-

-Toma esto –Dijo otra chica ofreciéndome una taza de té que olía un poco raro, pero apetitoso- te hará bien…

-G-Gracias… -Balbuceé torpemente- pero… ¿Dónde estamos? ¿Se ha ido la luz? ¿Por qué hablamos en voz baja?

-Estamos en el sótano de la biblioteca… -Ahora respondió uno de ellos- cuando te caíste ya estaban cerrando las puertas por fuera y nadie te vio…

-Ya veo… -Bajé la mirada un poco preocupado por pensar en que mis temores se hicieron realidad… me quedé encerrado en la biblioteca-

-Es de madrugada… -continuó hablando él- por eso todo está oscuro, cuando te sientas bien y amanezca, yo mismo me encargaré de llevarte con los tuyos al exterior… ahora es peligroso –Rió amablemente y se dio la media vuelta-

Me quedé mudo observando sus vestimentas… pareciera que eran de otra época, eran túnicas enormes, antiguas, color hueso… sus cabellos largos y platinos, brillantes y sedosos, muy bien peinados.

Todos se retiraron y me quedé solo un instante… ¿En qué problema me he metido? Jamás pensé que hubieran personas “subterráneas”. Qué extraño es todo esto, incluso, se podría escribir un libro acerca de éstas personas… vaya que si parecen seres fantásticos…

-¿Se te ofrece algo? –Una chica interrumpió mis pensamientos-

Ella se sentó a mi lado en la cama y me quedé mirando atentamente… era bella y delicada… muy limpia y etérea para ser verdad…

-Por qué… -Se me salieron las palabras involuntariamente-

-¿Por qué, qué? –Rió y comenzó a acariciar mis mejillas-

-¿Por qué son tan blancos, tan… raros? ¿Quiénes son ustedes? ¿A qué se refería él con que estábamos en el sótano y era peligroso? –Me senté en la cama con un poco de trabajo-

-Ah, era eso… -rió y me tomó la mano- mira… nosotros pertenecemos al grupo de los “guardianes”, somos una especie de tribu pequeña que durante siglos ha permanecido bajo la ciudad…

-Ah, supongo que por eso son tan blancos…

-Así es, fuimos designados voluntariamente para permanecer en éstos subterráneos, para cuidar al continente, si no es que el mundo, y a sus habitantes…

-¿De qué? –Dije confuso-

-De un terrible peligro para la humanidad…

-¿Qué es ese peligro?

-Escucha… no estoy autorizada para decírtelo, pero más tarde lo sabrás…

-A bueno… pero… entonces no estamos en el sótano de la biblioteca, ¿o si?

-Pues… realmente no, estos pasadizos se comunican con él ¿Ves? –Dijo mostrándome una pila de libros- a veces, por las noches podemos subir y traer algunos volúmenes para seguirnos cultivando y aprender de ellos… ¡No pienses que somos ignorantes! Así también conseguimos la comida, las medicinas y lo que necesitamos…

-Ah pero… ¿ya no devuelven los libros?

-Por supuesto que si –Rió de oreja a oreja y comenzó a jugar con mis cabellos, moviendo sus delicados dedos- por las noche subimos a dejarlos y así fue como te encontramos tirado en las escaleras…

-Ah, pero es que… -Quedé mudo al escuchar un ruido un poco “extraño”-

-GRRRRRRRRRRROOOOOOOWWWWWWWW –Un gruñido feroz se escuchó a lo lejos-

-¿Qué fue eso? –Grité espantado-

-¡Dina! ¡Dina! –Llegó corriendo otra chica- ¡VÁMONOS, ANDA CERCA! ¡HA DESPERTADO! ¡TRÁETE AL JOVEN!

-¿A DÓNDE LO LLEVAMOS?

-¡AL FORO! ¡SE OYE HAMBRIENTO!

Me tomaron de los brazos y corrimos a una velocidad impresionante, pasando por pasadizos oscuros que no pude distinguir… todo era tan rápido, y lo peor era que los gruñidos de lo que fuera, se escuchaban mucho más fuertes y cerca…

Tenía tanto miedo que no tardé en aumentar la velocidad, llevando de la mano a las dos chicas, siendo ahora yo el que las conducía… no se si en un descuido las aventé contra la pared o algo así, pero me pareció haberlo hecho… ejemmmmmmmmm

Corriendo a la izquierda y a la derecha, pasamos por varias cámaras con luz, por donde salían más y más “protectores”, que se nos fueron uniendo poco a poco a lo largo de la huida.

Así llegamos al dichoso “foro” que era una especie de cámara o cueva bastante grande, con varias entradas que tenían puertas enormes. Ahí supongo yo que se encontraban todos los “protectores” (de los cuales ignoro la razón de por qué eran tan jóvenes, blancos y bellos)

Todos se callaron de pronto y se apartaron a un lado, dejándome solito en medio de la cámara.

-¿Uh? –Dije confundido, e iba a comenzar a caminar hacia ellos cuando, de la nada, salió el que parecía ser el jefe de todos ellos y se acercó a mi-

Traía colgando un enorme medallón de oro y parecía ser ligeramente más grande que los demás…

-Así que tu eres el joven que encontró Dina… -Se paró en frente de mi y me miró fijamente-

-Sí, señor… -Mi voz salio en un chisguete-

-¿Cómo te llamas?

-Bill, señor… -Volví a responder como soldado-

-Bien, Bill… -Interrumpí-

-Señor, agradezco mucho lo que han hecho por mí, por sus cuidados y atenciones, pero yo quiero volver a la biblioteca, yo no pertenezco a acá, no me gusta, odio la oscuridad, además tengo que entregar un trabajo en la escuela, es muy importante, es para el último semestre y creo que ya han sido muchos sustos por ahora, por que estaba buscando sobre el arte siniestro, el cual es horrible, no se lo recomiendo mucho, y por eso me espanté y…

-¡CÁLLATE! –Gritó- ¡HABLAS MUCHO! –Abrí mis ojos tan grandes como dos platos y me callé- escucha… tu presencia aquí no es una casualidad, eres un enviado de los dioses…

-¿Yo? ¿Enviado de los dioses? HAHAHAHAHAHAHA ¡Yo solo estaba haciendo mi tarea!

-¡No importa! Los dioses actúan raro… esta tribu de protectores que ahora te abriga, se ha encargado durante siglos de cuidar a un ente maligno, habitante del subsuelo, que se alimenta de sangre y carne… para que no acabe con la raza humana, pues su poder es devastador… si el saliera de aquí, todo el mundo moriría y se contagiaría en poco tiempo… nosotros lo cuidamos y alimentamos, y él a cambio nos obsequia una planta exótica que crece en las profundidades, que nos da belleza, fuerza, juventud y vida eterna…

Para ese entonces yo ya estaba mudo y pálido del miedo… un desagradable presentimiento me atormentaba el pensamiento…

-Y… ¿c-c-como… l-lo… ali-alimentan…? –Pregunté tembloroso-

-Verás, amiguito, lo que hacemos para mantenerlo contento, a gusto y cómodo, es hacerle ofrendas vivas, pues a él, le encanta cazar… -rió perversamente- procuramos darle ofrendas frescas una o dos veces al mes, y hoy… precisamente HOY… es día de ofrenda, pues los dioses te pusieron en nuestras manos para ello y tendrás el honor de ser el principal elemento de nuestra sacrificio… o sea, tu eres la ofrenda…

-¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! –Grité como loco-

-¡RÁPIDO, AMÁRRENLO! –Ordenó él- está un poco flaco pero... igual servirá..

En ese instante, intenté huir, pero la verdad es que corrí en el aire (o sea, corrí en el mismo lugar), pues pronto me capturaron (montoneros) y me ataron de pies y manos, para colocarme sobre una piedra con forma de mesa, rodeado de frutas y flores…

Debo admitir que me veía apetitoso, digo, para el monstruo sería una especie de hamburguesa con papitas extra… lo único que me faltaba era una rica manzana en la boca para verme como puerquito… jummy! ¿?

-¡AUXILIO! ¡SOCORRO! ¡HELP! ¡AUXILIOOOOOOOOO! –Comencé a gritar con terror, cuando el tipo ese (el líder), se me acercó y me miró con rostro burlón-

-Tus gritos no servirán de nada… nadie te va a oir, solo aumentará su apetito…

continuará...

- - - - - - - - - - - - PRÓXIMA NOCHE - - - - - - - - - - - -

No, no, no... "GRRRRRRRRRRROOOOOOOOOOOOOOWWWWWWWWWWWW" sus gruñidos se acercan más y más mientras yo... logro ver su horrible figura... es la bestia más horrible que jamás he visto... salvaje, jorobado, con sangre en la boca... ¿Qué es eso? Es mi final... eso es, mi final...

Próxima noche: Grito 6 Noche 3 Comatose «Cacería»

I don't wanna sleep... i don't wanna dream...